¿Aún no conoces que tipo de piel tienes?
Conocer si tienes piel grasa o seca, o si tienes la piel normal o mixta; es esencial para saber qué productos escoger a la hora de tu rutina de cuidado facial.
Una de las formas o estrategias sencillas para identificar tu tipo de piel, es eliminar todo rastro de suciedad, maquillaje o producto, usando un limpiador suave o neutro. Cuando hayas limpiado tu piel a fondo, sécala dando palmaditas suaves y espera de 20 a 40 minutos. Luego mírate al espejo y analiza cuál de las siguientes opciones te describe mejor:
Piel mixta
Si después de 30 minutos, la piel de tu frente, mentón y alrededor de la nariz; tiene un aspecto grasiento, notaras que la grasa se acumula en la zona T. Ademas sientes tus mejillas tensionadas y secas, es probable que tengas una piel mixta. Puedes verificar aplicando un papel absorbente sobre tu rostro.
Hidratar la piel con crema a base de agua y aceite es de suma importancia.
Piel grasa
Si después de 30 minutos la piel de tu rostro, tiene un aspecto grasiento y se puede transfiere a una servilleta (papel), lo mas probable es que tengas una piel grasa. La piel grasa tiende a producir más sebo del necesario. Las causas son la predisposición genética, el estrés y las fluctuaciones hormonales. El resultado es poros dilatados, la aparición de granos, espinillas y puntos negros.
Con productos libres de aceites para su limpieza, como para su hidratación, puedes restituir el equilibrio natural de tu piel.
Piel seca
Si después de 30 minutos del lavado, tiene un aspecto áspero y descamado, puede ser que tu piel sea seca. La piel seca carece de hidratación y lípidos (grasa). Como consecuencia, es menos elástica, más tensionada y, en muchas ocasiones, tiende a picar. Este tipo es susceptible a los factores ambientales externos y suele reaccionar irritándose.
Debes utilizar cremas y productos para piel seca, de este modo podrás restituir su hidratación y fortalecer las barreras de protección natural de la piel.
Piel normal
Si tu rostro no parece particularmente seco o graso después de 30 minutos, es probable que tengas un tipo de piel normal. La piel normal generalmente no es grasienta, ni tensionada y tampoco es particularmente susceptible a las imperfecciones y el acné. Las personas con una piel normal suelen tener poros pequeños y una tez suave y tersa.
Es posible que no necesites esforzarte mucho para mantener tu piel saludable e hidratada, aunque eso no significa que puedas pasar por alto su cuidado. La piel normal también puede sufrir debido a las impurezas y la contaminación. Usa un limpiador que elimine al 100% las toxinas y prosigue con una crema hidratante que proteja tu piel de los contaminantes externos.